Situado
en pleno cañón de la Horadada, dista de Trespaderne
unos tres Kilómetros.
Cogeremos la carretera hacia Oña y a unos dos kilómetros
encontraremos la estrecha carretera, 1 kilómetro, que nos
conducirá a Tartalés de Cilla.
Es un pueblo de calles estrechas y en cuesta. Si alguien quiere
encontrar tranquilidad, naturaleza o alejarse del mundanal ruido
en Tartalés no le será dificil conseguirlo.
Lugares a destacar son: la Iglesia de San Martín del siglo
XII, el antiguo horno, la bolera, la fuente, sus casas.
Celebra
sus fiestas » el tercer
domingo de setiembre en honor de San Fermín. Son fiestas
entrañables a las que acuden cantidad de personas procedentes
de los pueblos de alrededor. El orujo con moscatel, las comidas
en sus campas, la misa en honor del Santo, los bolos, la tuta, la
morcillada al anochecer y el café de puchero, le recibirán,
si se decide a acudir a estas fiestas singulares, distintas de las
que uno suele encontrar hoy en día.Tartalés
es pues algo diferente de lo actual, la mejor forma de admirarlo
es pasear por sus calles y contemplar la majestuosa naturaleza que
le rodea.
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